Resulta que antes de que volviera a caerse el cielo sobre nuestras cabezas tuvimos unos días donde lucía el sol y apetecía cenar frío.
Fueron un espejismo.
Hoy os escribo mientras escucho una soporífera clase de como enseñar ciencias de forma interesante y amena —paradojas de la vida— mientras llueve tras la ventana. Es posible que estar en clase renovando el blog no sea la mejor forma de aprovechar la misma, pero lo he intentado los primeros cuarenta y cinco minutos con escaso éxito. Me duermo. Si llego a dar clase algún día y a cualquiera de mis alumnos se le ocurre cocinar mientras encuentra el punto por el que la recta corta el plano, no tendré más remedio que callarme y comer lo que me ponga.
El caso es que en aquellos días de calor y ¿ociosidad? surgió una petición de sopa de pepino. Cucumber soup. Y yo a estas cosas ni sé ni quiero decir que no. Por ello, este platillo. A punto he estado de contarle la receta hoy a la examinadora del speaking de la Escuela Oficial de Idiomas cuando me ha preguntado por ventajas y desventajas de la dieta vegetariana. Había que divagar.
Y entonces, puestos a divagar completamente; comprad un par de pepinos de sobra, preparad un buen pan de molde y tened siempre en la despensa una digna mantequilla. Podréis haceros sandwiches de pepino cual Lady Augusta en La importancia de llamarse Ernesto. Y, entonces, que llueva, que nos dará igual.
Ingredientes
· Dos pepinos
· Media manzana ácida
· Uno o dos yogures naturales buenos
· Unas hojas de menta
· Aceite de oliva virgen extra
· Vinagre de manzana o zumo de limón
· Sal
Preparación
1. Pelamos los pepinos. Los troceamos.
2. Troceamos la manzana.
3. En el vaso de la batidora incorporamos todos los ingredientes y procesamos hasta que quede una crema de textura fina.
4. Pasamos por el chino.
5. Refrigeramos.
Notas
- En esta ocasión utilicé un yogur y medio. Sí, medio, porque soy así de cursi. Me pareció que con esa cantidad obtenía la textura que me apetecía. Además, en mi casa los medios yogures que aparecen en la nevera tienen mucho éxito.
- Lo mismo sucedió con la media manzana. ¿Se la queréis echar entera? Ningún problema.
- Con la media manzana y el medio yogur tenéis media merienda apañada mientras preparáis la cena.
- En la receta de El Comidista utilizan yogur de leche de cabra y opcionalmente, un poco de sumac/zumaque que es una especia que en estos momentos no tengo en mi despensa, pero todo se andará.