3 de mayo de 2015

bacalhau espiritual

Bacalhau espiritual

Como me dijo Ana el otro día vuelvo con ínfulas británicas de mi periplo irish.

He perdido la modestia sobrevolando el Atlántico. Estoy dos gintonic más cerca de parecerme a la reina de Inglaterra. 


Sin asomo de sonrojo puedo decir que esta maravilla que hoy me digno a traeros es un PLATAZO de bacalao. De esos en que se te cae la lagrimilla de emoción. De esos con los que consigues que te adoren tus súbditos, digo tus comensales. Aquel con el que te recordarán los libros de historia de las comidas familiares.

Así que con la pompa y boato que la ocasión merece he sacado un mantel y ¡lo he planchado! He servido el bacalhau espiritual —si es que hasta el nombre es rimbombante— en cazuelitas de terracota y nos lo hemos comido con tenedor de plata un bonito domingo soleado encargado a Ra para la ocasión.

Antes de que los árboles no me dejen ver el bosque y siga divagando por altivos caminos, tengo que contaros que es un plato tradicional de la estupenda cocina portuguesa, que me enseña, como siempre, el gran blog de Mercado Calabajío. No sabría que hacer sin ellos, Carlos y Lola, que son los que realmente debieran presumir :)


Ingredientes. (4 personas)

· Dos patatas grandes.
· Cuatro tajadas de bacalao.
· Una zanahoria.
· Un puerro.
· Una cebolla grande.
· Un diente de ajo.
· Aceite de oliva.
· Sal.
· Una nuez de mantequilla.
· Media guindilla.
· Pimienta negra.
· Nuez moscada.

· Perejil.
· 500 mL de leche.
· Una cucharada colmada de harina.
· 50-100 g de queso semicurado.

Preparación.

1. El bacalao. Ponemos agua en una cazuela, cuando comience a hervir añadimos las tajadas, apagamos el fuego y dejamos el bacalao dentro. Una vez frío, le quitamos la piel y las espinas con cuidado. Desmigamos con las manos.

2. Las patatas. Pelamos y lavamos las patatas. Tenemos que preparar patatas paja. Si tenéis una mandolina será más fácil. Las metemos en agua después de cortadas. Ahora las escurrimos y las vamos friendo en tandas a fuego medio fuerte. Reservamos sobre papel absorbente.

3. El sofrito. Pelamos la cebolla, la zanahoria y el ajo y lavamos bien el puerro. Cortamos en juliana la cebolla y el puerro. Rallamos la zanahoria y trituramos el ajo. En una sartén con un par de cucharadas de aceite pochamos la cebolla. Cuando comience a estar dorada añadimos la zanahoria, el puerro y finalmente el ajo. Sofreímos durante 5 o 10 minutos más a fuego suave.

4. La bechamel. En una sartén ponemos una cucharada de aceite y una nuez de mantequilla. Tostamos la harina en esa grasa y vamos añadiendo la leche caliente poco a poco removiendo bien para que no nos salgan grumos. Cocinamos a fuego suave unos minutos. No debe quedar demasiado espesa. Salpimentamos y rallamos un poco de nuez moscada.

Una vez preparados todos los ingredientes procedemos al montaje.



5. Montaje. En una fuente apta para horno colocamos el sofrito de base, añadimos el bacalao desmigado, las patatas paja y perejil picado. Mezclamos los ingredientes con cuidado de no espachurrar nada. Napamos con la bechamel y cubrimos con el queso rallado y un poco más de perejil. Horneamos durante 20 minutos a 180-190 ºC y finalmente gratinamos durante 5 minutos más.

Bacalhau espiritual


Recomendaciones.

- Incorporar una guindilla durante unos minutos al aceite con el que hacemos la bechamel.
- Dorar las verduras con una hojita de laurel.

Fotos de lectores.

La ilusión que me ha hecho que mi tía Paloma haga la receta, no os la podéis imaginar.
 
Desde Dublin para el mundo, Yas se anima también con el bacalao.

Lo de este plato no es normal.

7 comentarios:

  1. A qué está rico este plato ¿verdad? Desde que lo descubrimos no paramos de recomendarlo. Este año aún no lo hemos hecho, pero caerá, caerá...
    Y mil gracias por tus palabras, a nosotros lo que nos alegra la existencia y nos da muchas fuerzas es ver comentarios así!
    Un beso grande Lu!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muchísimas gracias Carlos por pasarte! No me extraña que lo recomendéis a todo el mundo. Luego miré el comentario que os había hecho en su día en el blog, y mira que se hizo esperar probar la receta, pero ha merecido la pena con creces.

      Un abrazo!

      Eliminar
  2. Dios, tiene una pinta que hace que me replantee eso de que no me gusta el bacalao.
    Como siempre pruebo todo lo que lo lleva con la esperanza de que me guste, como la empanada de maíz de mi abuela y las croquetas, quizá me anime. :D

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Por cierto, la primera foto está muy bien!

      Eliminar
    2. Jaja. Creo que es un buen plato de iniciación al bacalao, pero yo no le hago ascos a ninguna de sus modalidades, jeje. Lo de la empanada de maíz, me acaba de sonar muy bien.

      Es curioso lo que se aprende, la foto luce más solo porque las rayas del mantel están en diagonal, porque tengo la misma foto con las rayas en paralelas al rectángulo de la foto, y no es ni la mitad de lucida, jeje. Será el dinamismo de la diagonal, jajajajjja.

      Eliminar
  3. Es espectacular ¿Como decir "está muy rico" para que realmente sepáis que está buenísimo?
    Pruebas:
    - "Está que te cagas" (clarificador pero demasiado ordinario)
    - "Está cojonudo" (es rotundo pero suena a C.J. Cela)
    - "Está para chuparse los dedos" (más adecuado para unas chuletillas de palo porque aquí no te manchas)

    bueno, pues que lo probéis que es un éxito asegurado, ideal para quedar bien (y ponerte las botas)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hala! Te ha faltado la versión pedante, con lo que tú eres, jajajajajjaa.

      Eliminar